Características y manejo seguro de los equipos de laboratorio    mercadeodigitalofec@gmail.com 

TUBOS DE ENSAYO

En algunos libros llamados Probetas.  Son tubos alargados, de vidrio refractario, cerrados por un extremo, con fondo redondeado que permite un mayor depósito de precipitados y facilita la evaporación de pocas notas de fluido. Se emplean con mucha frecuen­cia en el laboratorio y se requieren en grandes cantidades.

Sirven para hacer reacciones en pequeña, diluir pequeñas cantidades de sustancia, análisis y síntesis en poco tiempo, particularmente ahora que la práctica quí­mica se inclina al trabajo en escala micro y semi micro.

Al usarlos no se deben calentar por el fon­do sino cerca de la superficie del líquido para que éste no salga lanzado violentamen­te al hervir. Se calienta a la llama direc­ta del bunsen introduciéndolos y secándolos rápidamente a tiempo que se agitan, pero deben estar secos por fuera ya que de lo contrario pueden vencerse.

Debe siempre mantenerse la boca del tubo ha­cia un lado distinto de la cara del operador para evitar quemaduras. Una mejor manera es calentarlos al Baño María, cuando debe hervir para producir una reacción. Normalmente se llena menos de una cuarta parte para hervir­los evitando así que las burbujas hagan salir el líquido. Para evaporar a sequedad es pre­ferible usar una cápsula de vidrio refracta­rio o de porcelana calentada al Baño de Are­na.

Los tubos de ensayo suministrados por OFEC son importados y poseen bajo coeficiente de dilatación térmica, por tanto resisten los cambios bruscos de temperatura, son poco fusibles y pueden ser calentados al rojo du­rante algún tiempo. Su manejo requiere mate­rial auxiliar suministrado por OFEC, tal co­mo gradillas, pinzas en metal y madera, tapo­nes, etc. Se obtienen en diversos tamaños siendo el más didáctico el de l6 x 150 mm.

Se recomienda una buena provisión de  tubos de  13 x 100 mm ya que permiten  un buen ahorro de reactivos y es  mucho más rápido trabajar con ellos.