Características y manejo seguro de los equipos de laboratorio    mercadeodigitalofec@gmail.com 

EMBUDOS

Muy  útiles en el trasvado de líquidos. No son adecuados para sólidos por  tener en  general el tallo muy largo  y delgado. 
 Destinados a la filtración de precipitados. Son conos huecos con un ángulo de 60  grados  terminados  en tallo biselado.

Los embudos analíticos presentan un tallo más largo. El extremo final se coloca tocando la pared del frasco receptor para que el líquido baje uniformemente y sin gotear. El tallo largo al estar lleno de líquido  y empujado por la  presión atmosférica  forma una columna relativamente pesada que  empuja  hacia abajo  la fase líquida de la mezcla que está en el papel y se genera un efecto de succión que permite acelerar el proceso de filtración  y facilita el posterior lavado del precipitado en el solvente adecuado.

A ellos se adhiere con agua o con el solvente adecuado al papel de filtro. Que puede doblarse en cono, al que se arranca una punta del doblez interno para evitar que el líquido refluya en el por capilaridad  o se puede hacer un filtro de pliegues que es  un poco más difícil de doblar, pero permite una filtración más rápida porque da una mayor superficie de salida del líquido y esto es muy útil cuando se trata de precipitados gelatinosos o coloidales, cuyas micelas suelen obstruir los poros como por ejemplo hidróxidos  de cobre o aluminio, soluciones de albúmina precipitada con sulfato de amonio, etc.
Si la fase sólida  no es muy importante, ni es demasiado fina, se puede reemplazar de forma económica  el papel de filtro por un pequeño taco de algodón  en el vértice del cono, que penetre  suavemente al comienzo del tallo, lo suficiente para que no flote al llenarse con el líquido a filtrar. En caso  de que la celulosa del algodón pueda disolverse (Álcalis concentrados o  ácido sulfúrico, etc., da muy buenos resultados una pequeña mota de lana de vidrio.
Si en la filtración  ya sea con  papel de filtro o algodón, observamos que pasa parte del precipitado  por ser muy grande el poro  para el tamaño de  las partículas, las podemos re filtrar, de modo que se obturan  los poros y finalmente  podemos obtener un filtrado transparente. A esto se llama purgar el filtro.

Se presentan en diferentes diámetros, desde 0 65 mm 35 hasta 150 mm