Material:

Bases de soporte, varillas cortas y largas, cordel, 2 imanes, hoja de papel.

Procedimiento:
Construimos un Magnetómetro sencillo, colocando sobre la base de soporte armada como antes, una varilla roscada con una nuez en el extremo superior sobre la que colocamos  otra varilla corta.

Se ella atamos una cuerda que sostiene un imán y llega casi a la superficie de  la mesa. El imán debe estar bien equilibrado en su centro para que se sostenga en posición horizontal, manteniéndolo 1 o 2 cm sobre la superficie. Para  ayudarlo a estabilizarse, podemos colocar debajo el electrodo de aluminio, sin que se toquen, ya que las corrientes de Foucault crean un freno magnético. Debajo colocamos una hoja de papel. El imán se orientará colocándose su eje longitudinal en la dirección norte - sur, la cual marcamos en el papel, dibujando una flecha. Perpendicularmente a esta dirección acercamos el polo norte o sur de un segundo imán. Observaremos como el imán que cuelga se desvía de su posición inicial.

Según sea la distancia a que acerquemos los imanes, observaremos como la desviación es tanto mayor o menor, para una determinada distancia de los polos, la desviación del imán que cuelga es de 45º. En este caso las fuerzas del campo del segundo imán, que actúan sobre el Magnetómetro, son iguales a las fuerzas del campo magnético terrestre.

Resultado:

Por medio de un Magnetómetro puede determinarse la distancia a un imán para la que se cumple que las fuerzas magnéticas son iguales a las originadas por el campo magnético terrestre.